¿Estás pensando en apuntar a tus hij@s a clases de teatro? Si es así, desde aquí queremos animarte a que lo hagas. Y es que, además de aprender, en ellas podrán desarrollar otras muchas habilidades que les serán de gran utilidad en el futuro. Aquí vamos a hablarte acerca de los principales beneficios de los que podrán disfrutar tus pequeños cuando empiecen a practicar esta actividad.
L@s niñ@s, mediante el teatro, consiguen mejorar sus habilidades comunicativas. De hecho, está comprobado que aquellos que realizan esta actividad desde que son pequeños alcance excelentes cotas de fluidez, claridad, dicción y vocabulario mucho antes que los que no.
Leer es un hábito imprescindible para el aprendizaje. De hecho, la literatura es la base del conocimiento y una herramienta que nos acompaña durante toda la vida. El teatro, mediante la lectura y la memorización de guiones, le ayudará a valorarla adecuadamente.
Ell@s no solo aprenderán a hablar y a expresarse mejor con palabras, sino que también tomarán conciencia de su cuerpo y serán capaces de transmitir de una manera más adecuada sus sensaciones y sentimientos a través del rostro y las manos.
Además, si le está costando hacer nuevos amigos en el colegio o el instituto, pocas actividades hay que fomenten más la creación de lazos de amistad que esta. Y es que hace más fácil encontrar a personas con los mismos gustos y aficiones.
Salvo que estemos hablando de “Cinco horas con Mario”, una de las mejores obras de Miguel Delibes, resulta difícil encontrar una obra que sea ejecutada por un solo protagonista. De hecho, la colaboración entre todos los actores, sin importar si son protagonistas o secundarios, es fundamental. Tus hijos aprenderán que sin la colaboración de todos ellos es imposible representar la obra, lo que le será muy útil de cara a su futuro estudiantil y profesional.
Tus hij@s van a adquirir la habilidad de ponerse en el lugar de un determinado personaje y, gracias a ello, entenderán cómo se sentían estos ante la situación planteada por el guion. Con el paso del tiempo, aprenderán a conectar con sus emociones más fácilmente y a entender lo que sienten, lo que se traducirá en una mayor confianza en sí mismos.
Una obra de teatro requiere de meses de preparación para ser representada. Gracias a esta circunstancia, tus pequeños aprenderán que las metas no son inmediatas y que se requiere esfuerzo, constancia y paciencia para alcanzar sus objetivos.
En definitiva, las clases de teatro pueden ayudar a que tus hij@s tengan un mejor desarrollo psicológico, social y afectivo durante su juventud y su adolescencia. Por este motivo, apuntarlos a ellas desde que son pequeños es fundamental para que lleguen a ser grandes personas. Aunque no lo sepas, ya les estarás ayudando a su desarrollo personal y profesional.
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